De vuelta a casa

Por: Carlos Alberto González G
Redacción deportiva
Chía, febrero de 2007


El pasado domingo 18 de febrero de 2007 regresó a las canchas argentinas, mas exactamente al estadio la bombonera, Juan Román Riquelme, quien hace aproximadamente cinco años no vestía la camiseta xeneize.

El estadio completamente ocupado con un ambiente de festín, pues un ídolo de la afición regresaba a su casa. El comienzo de Román no fue distinto a lo que había mostrado tiempo atrás en el mismo Boca y más tarde en el Villarreal de España. Movilidad, pasos precisos y el famoso “toco y me voy” volvió a verse sobre el terreno de juego.

Pero Rosario Central, su rival de turno, no quería permitir que la fiesta fuera redonda. Al minuto 38 del primer tiempo el juvenil Zelaya aprovechó un error de la defensa para marcar el primer gol del partido. Eso no fue todo, se apropiaron del balón con propiedad y mostraron gran capacidad para el contragolpe.

Si ponemos el partido en una balanza, esta quedaría equilibrada, razón por la cual el gol de Rodrigo Palacio en el segundo tiempo, fue una recompensa justa tanto para el equipo de Boca como para el partido como tal. Además la gran actuación de los arqueros reflejo las oportunidades con las que contaron los dos bandos.

Lo cierto es que regreso uno de los mejores jugadores argentinos, ese que con sólo pisar el balón hace que se produzca magia, que con una visibilidad y sentido de orientación es capaz de convertir un pase de 20 metros en opción clara de gol, que convirtió la definición de tiro libre en gol seguro. Sólo es cuestión de que recupere ritmo y nivel de juego que lo da la continuidad de estar dentro de la cancha domingo tras domingo.

Lo cierto es que el mejoramiento de Boca será proporcional a la calidad y el nivel de Riquelme, pues con el manejo de imagen que le han dado todos los medios de comunicación, será difícil ver al astro argentino en la banca, y aunque no encaje con el juego boquenze, será una ficha indudable en la cancha.