sábado, 21 de abril de 2007

Deportistas por necesidad o por gusto

Nelson Castro, toda una vida compitiendo, una perspectiva desde los dos lados de la mesa.

Por: David Enrique Moreno Mejía

El diciembre de 1963 no fue un mes normal para Nelson Castro, este día fue la primera vez que sus manos palparon una raqueta de Tenis de Mesa. “En una tarde que no tenía nada que hacer porque acaba el colegio, Javier, un amigo, me invitó a jugar este deporte, me pareció entretenido y continué practicándolo diariamente”, asegura Castro.

Así como Nelson Castro, entretención es una palabra que se les viene a la mente a las personas cuando piensan en algún deporte. Sin embargo, en Colombia el deporte en muchos sectores deprimidos del país es visto como una salida económica a una situación de pobreza. Motivación errónea y superficial que ha construido una cultura donde lo que vale no es el triunfo sino el dinero que se consiga.

Sin embargo, es importante aclarar la función educativa, social y emocional que un deporte brinda a los seres humanos. Este fue el caso de Nelson Castro, un joven que a sus 15 años de edad, haciendo noveno de bachillerato, evitó una vida de vicios y rebeldía en la que su círculo social quería envolverlo. Presión que supo manejar, y haciendo una cara de tranquilidad confiesa que “mi mejor amigo, o el que yo consideraba que lo era, trató de inducirme a robar un supermercado con el fin de pagar un televisor que había roto en otro robo y lo habían pillado”.

Dicho robo nunca se realizó, o por lo menos no con la complicidad de Nelson, quién decidió ir a un torneo aficionado de tenis de mesa en la tarde que se había planeado el hurto. Sin embargo según él, esta no fue la razón fundamental de su decisión, asegura a que una frase dicha por la persona que lo estaba entrenado lo hizo cambiar de decisión. “Fabián el entrenador de aficionados de pueblo, en Facatativa, me dijo “quién gana haciendo trampa, o manipula resultados no es digno de del deporte que práctica” y esa frase me llegó al alma”

Frase que significó aún más apasionarse ya en un nivel más alto en su deporte. A los 17, apenas terminó su bachillerato se ganó un cupo en la liga de Cundinamarca con la que fue campeón departamental. Sin embargo, obtener este triunfo no fue fácil para él, no sólo por el factor deportivo sino a nivel personal, donde constantemente tuvo problemas con su padre por practicar este deporte. “mi papá quería que yo jugara fútbol como el lo hizo, como era la tradición de mi familia, llego a decirme que ese deporte si era de hombres, y hasta de pronto podía ganar dinero y no vivir de limosnas”

¿Pensamiento antiguo? O aún vigente en la cultura de hoy en día. Es notorio que la tradición del fútbol ha pasado de generación en generación, y la idea de que “ese deporte si da plata” también.

Pensamiento que es muy difícil de romper, es un proceso, el cual involucra la participación activa de los hogares, los gobernantes y hasta los medios de comunicación. Estos últimos, culpables de no difundir deportes donde existe mucho talento. “Es obvio que si la selección Colombia gana el mundial de fútbol es noticia, pero ¿ocurriría lo mismo si un colombiano ganara el mundial de tenis de mesa?” se pregunta Nelson Castro colocándose las manos sobre la cabeza.

Por otra parte, todos los deportistas buscan representar los colores de su bandera internacionalmente. “Sí, es el sueño de todos, y aunque yo no pude pertenecer a la categoría élite, creo que es un sensación de reconocimiento y responsabilidad frente a miles de personas” asegura castro. Así como él, los deportistas en Colombia son muchos, y ellos le dan su vida al deporte, pero asimismo lo que aprenden del deporte se convierte en su esencia “sin lugar a dudas el deporte, por su rigurosidad, brinda valores, forma carácter y moldea un estilo de vida sano”

Por último, en la cultura de los colombianos está la actitud luchadora, aguerrida, de no dejarse vencer fácil. Elementos que se reflejan en los deportistas colombianos. “Yo he vívido difíciles situaciones personales y deportivas, sin embargo una se complementa con la otra, el deporte me ayudó a salir de problemas económicos y mi rectitud me ayudó a ser bueno y digno de practicarlo”

Actualmente Nelson Castro tiene 33 años de edad, es un reconocido entrenador de tenis de mesa en la Liga de Bogotá y Universidad de La Sabana. Una persona que tiene muchas amistades gracias a su profesión, pero también la responsabilidad de formar cultura a través del deporte en los jugadores que actualmente dirige. Casualmente ahora salen de su boca los consejos que una vez lo salvaron, con la esperanza que los aprovechen como alguna vez él lo hizo.

“los valores que se muestren
el en juego se reflejan en nuestra vida diaria”
Nelson castro



El juego por T.V

Por: Diego Iván Cruz

Para muchos el partido Millonarios-Quindío comenzó a las 5.30 pm. Por el contrario, para algunos este mismo se inicio desde las 11 de la mañana. A esa hora no rodó la bola pero si empezó el trabajo para otro equipo que se juega tal vez más que los mismos actores del encuentro. Se inicia el proceso de montaje de la transmisión por televisión.

La labor se inicia con la llegada de la móvil de transmisión acompañada por su respectiva planta de energía a las 11.05 am. Su lugar de trabajo es el costado norte del estadio El Campín. En este punto son esperadas por el director de la transmisión, parte fundamental del equipo.

Con la llegada de lo encargados de audio, camarógrafos, operadores de VTR, asistentes y demás miembros, el esquema de la transmisión comienza a elaborarse. El primer paso es montar los equipos dentro y fuera del estadio. Todo debe transcurrir dentro de lo previsto.

Más de 300 metros de cable ruedan por el suelo, algunos asistentes se trepan en los techos para así asegurar que las comunicaciones estén listas y que ningún inconveniente dañe la planeación de este compromiso.

El coordinador, como responsable de la estrategia de transmisión, reparte instrucciones a todos sus muchachos. Los encargados de audio se cercioran de los micrófonos y que los cables alcancen. Las personas de las cámaras prueban los ángulos y sus posiciones. El ingeniero ubica la señal en todas las pantallas de la móvil, usualmente, es él quien está dando todas las instrucciones para que ellos ganen este partido y el juego llegue a millones de televidentes cada domingo.

La misión no es fácil, pues siempre se presentan inconvenientes de última hora como que una cámara se apague, que un cable se rompa o que las comunicaciones se corten. Estos son apenas algunos de los problemas que deben enfrentar cada partido los miembros de este grupo.

La concentración es tal vez más importante para los integrantes de la producción que para los mismos jugadores de fútbol, un error seria bastante doloroso no solo por lo que significa como señal sino por las consecuencias económicas que este puede tener, ya que una transmisión tiene unas pautas vendidas y de no ser evacuadas durante partido traerían problemas muy grandes tales como demandas o perdidas de dinero.

Ya con todo instalado y probado comienza la etapa de “calentamiento” que inicia alrededor de las 5:00 de la tarde. Esto consiste en probar la recepción de señal en estudio y probar la comunicación de los periodistas de planta baja con los presentadores en el set. Este ejercicio debe salir perfecto pues en esta transmisión la responsabilidad recae en los dos periodistas de camerinos que son los que están en el estadio y tienen la misión de informar cualquier detalle sobre el transcurrir del partido y cualquier incidencia que se presente tanto en la cancha o en las tribunas.

A las 5.29 pm la suerte ya esta echada, la concentración es mayor todavía, se debe recibir la señal de estudio en un momento preciso y así comenzar la producción del partido. Desde el set dan la orden de estar preparados, la cuentan allá y la cuenta en la móvil, 10, 9,8, 7,6, 5, 4, 3, 2, 1 ¡al aire! Grita el coordinador, el encargado del VTR desea buena suerte a todos, mientras el coordinador se persigna y da el mismo mensaje a cámaras y asistentes.

Durante la trasmisión poco se habla. El coordinador da las instrucciones de forma serena. En la cabina todos comentan una que otra jugada sin descuidar su tarea. El ingeniero sale a hacer recorridos para mirar que todo funcione correctamente. Desde el estudio piden algunas cosas como detallar jugadores claves, señalar a los que amonestan o los autores de los goles, en general todo transcurre con tranquilidad.

Comenzando el segundo tiempo, una pantalla de la móvil se apaga y el coordinador pierde a una de sus cámaras, todo explota, gritos van de lado a lado, el ingeniero corre para mirar que ocurrió, la tensión se siente en toda la cabina, desde estudio el productor no para de gritar, la calma solo llega 30 segundos después cuando el ingeniero encuentra el daño y lo arregla. Era un cable que se había soltado, todo se normaliza pero ya nadie habla.


A las 7:29 pm todo termina, se les agradece a todos su colaboración, los periodistas se desconectan y entregan sus micrófonos a los asistentes. Otros corren de lado a lado jalando los cables para después enrollarlos y guardarlos, todo se hace muy rápido nadie quiere demorar esto.

Tan solo pasan 15 minutos y la móvil ya esta prendida esperando al último de los colaboradores que trae un televisor que estaba en una cabina del tercer piso, solo fue que lo vieran y le gritaran que se moviera para que todo acabara. Ya con todo listo el vehiculo arranca y deja su lugar de trabajo desocupado como lo encontró.

El partido en la cancha no tuvo un ganador pero los televidentes si triunfaron al poder ver sin ningún problema a sus equipos y esta victoria se la dio un grupo de gente que trabaja disciplinadamente para dar lo mejor en cada oportunidad que se le requiere.

Ilusiones por un balón

Por: Diego Iván Cruz

Al inicio del periodo universitario de 2005 y después de muchos intentos fallidos, comienza el primer campeonato que Senegal F.C afronta como equipo base e insignia de la facultad de Comunicación Social de la Universidad de la Sabana.

Muchos de los integrantes de este nuevo conjunto eran jugadores de la Naranja Mecánica que fue un intento fallido de equipo que trajo mas decepciones que alegrías. Cansados del incumplimiento y la falta de amor por la camiseta algunos de los jugadores de la Naranja decidieron hacerse a una lado de ese nocivo proceso que tenia el equipo y fue cuando en una tarde de copas y después de un agitado día de clases se reunieron con viejos compañeros que habían sido descartados de la Naranja quienes tenían en mente la creación de un proyecto que de verdad los identificara y que reuniera un sentimiento de fraternidad por encima de un simple gusto por el deporte. Esa tarde en medio de alcohol y miles de promesas salio solo una cosa clara y fue la formación de un equipo que competiría en el torneo interno de la universidad de la Sabana, no tenia nombre y casi ni jugadores pero si reunió las ilusiones de un grupo de amigos.

No existen fechas exactas, unos dicen que fue un 8 de febrero, otros dicen que un 7 también están otros que en medio de sus lagunas mentales dadas por el alcohol no recuerdan que hayan asistido a esta reunión, lo importante es que la idea no murió con las botellas sino quedo presente en cada uno de los que decidieron dar rienda suelta a esta ilusión.

Cuando se inicia algo los ánimos siempre son los mejores, se prometen muchas cosas que como el mismo tiempo pasan y pasan y pocas se cumplen, en las primeras reuniones las cuales se hicieron con apenas 8 jugadores entre los que se destacaban los llamados fundadores Felipe Pardo, Julio González , Sebastián Álvarez se dijo que se debía entrenar dos veces por semana para mantener un buen estado físico, de dichos entrenamientos solo se realizo uno en el transcurso de ese primer ciclo del equipo que paradójicamente no tenia nombre aun.

Con el paso de los días y con el inicio del campeonato a puertas, el equipo no conseguía completar la nomina para así afrontar de una manera digna el torneo. Desesperados al sentir que nadie quería jugar con ellos y que todo se derrumbaba, llego la solución a enterarse que algunos viejos integrantes de la Naranja Mecánica que no tenían donde jugar y lo más importante que eran personas afines al pensamiento que se quería para este nuevo reto.

Con todo casi listo faltaba lo más importante que era la forma de bautizar esta ilusión, esta decisión se decidió en la misma ventanilla de inscripción y con tan solo un sondeo apresurado entre las dos personas que fueron a efectuar la inscripción. Con el afán de escoger algo rápido pero que en verdad pudiera identificar lo que se quería con este proyecto entre los dos personajes salieron 3 nombres, Brasil, Comunicación F.C y Senegal F.C. Brasil ya lo tenia otro equipo inscrito, Comunicación era bueno pero no representaba lo que se buscaba con el nombre, por eso se decidió por Senegal que simbolizaba el tener un espíritu guerrero y berraco cosas que eran comunes en estos muchachos.
Llego el debut exactamente el 19 de febrero a las 4 de la tarde. El rival era un equipo de Administración de Empresas llamado Ajax también en proceso de formación. Tras un reñido partido se logro un empate a dos goles que después se definió por penales donde Senegal perdió pero al menos se consiguió un punto que fue el primero de una campana que dejo alegrías y tristezas pero que a su vez fue el primer paso para lo que seria mas adelante el orgullo de un grupo de amigos que un día se dejaron de sueños para construir realidades, realidades con algo que los apasiona como es el fútbol.

Esa primera temporada dejo al equipo en la segunda ronda derrota por un grupo de muchachos que ya tenían un nombre en el fútbol de la universidad, Chacaritas dejo a medias el anhelo de conseguir algo grande en la primera temporada.

La segunda temporada trajo un espíritu diferente, ya se conocía los rivales y se iba definiendo la forma de jugar del equipo, con la salida de algunos integrantes por indisciplina o falta de compromiso el torneo paso sin pena ni gloria y ni la primera ronda se pudo superar.

Con la moral baja pues los dos torneos anteriores no habían sido buenos, el inicio del 2006 traía algo diferente que se sentía en cada uno de los jugadores, a eso se le sumaron las contrataciones de lujo que se hicieron, un jugador legendario dentro del ambiente universitario y con experiencia de juego en la primera B de Argentina era Mauricio González con el cual se había realizado un gran esfuerzo para convencerlo de que el proyecto era para salir campeones y que todos iban para el mismo lado.

Así se reunió una nomina de lujo que tenia en el arco a Juan Diego Cardoso, en la defensa Santiago Campuzano, Carlos “mitch” Rúgeles y Juan Felipe Pardo, en el medio campo Julio González, Diego Cruz y Sebastián Álvarez, adelante Hernán “turbito” Jaramillo y Carlos Alberto González “ gabo”.

Todo estaba dado, la nomina lista y el espíritu lleno de ganas y fuerza para dejar todo en las batallas que enfrentaran. La primera ronda fue un motivante pues se ganaron partidos con contundencia y el equipo poco a poco se acoplaba a lo que se quería. Senegal fiel a su estilo era un equipo guerrero, de sacrificio donde nunca se daba por perdida una pelota y en el cual el compañerismo se veía en cada partido.

La segunda ronda enfrenta a un combinado de derecho y administración que era muy fuerte. Con integrantes de la selección de la universidad el rival era importante, pero el peor enemigo ese día no era el contrincante sino el estado del campo de juego, pues era una temporada de lluvias y la cancha estaba echa un lodazal, la bola no rodaba y el barro se veía en todos los uniformes en el campo. Pero esto no fue un impedimento o causa para bajar los ánimos dentro de Senegal, el equipo en una muestra de fuerza y amor a sus sueños hizo su mejor esfuerzo. Nunca se dejo de correr ningún balón, con el corazón y el empuje digno de los guerreros míticos. Senegal consiguió la ventaja a mediados del primer tiempo y después con todos sus jugadores atrincherados y con todo su ímpetu en la cancha lograron resistir la arremetida del otro equipo que atacaba con todas sus fuerzas y que nunca renuncio a la búsqueda de un resultado positivo para conseguir el paso a semifinales.

La semifinal era un choque contra el subcampeón y el primer rival que Senegal tuvo en sus inicios se trataba de Ajax, los dos habían comenzado al tiempo y justo ese día la historia los ponía en una situación muy importante como una semifinal. Fue un partido intenso donde no se arriesgo mucho, por eso no se marcaron goles y fue necesario definirlo por penales. En este momento fue cuando Juan Diego Cardoso se vistió de héroe atajando 3 de los 4 penales que se ejecutaron, la definición final la dio Hernán Jaramillo con un suave disparo al lado contrario del arquero. Era el principio de la hazaña, los sueños de este grupo de muchachos estaban cerca de cumplirse, después de esa semifinal la ansiedad recorría la mente de cada uno de los jugadores que solo comentaban lo que pasaría si se ganara el campeonato, fue una semana eterna donde solo se pensó en ser campeones y en dar todo para conseguirlo.

Llego el día final, todo estaba listo para la fiesta del fútbol universitario, Senegal se concentro 2 horas antes del partido en un restaurante cercano a la universidad donde se hablo de cómo se afrontaría el partido, no se hablaron de tácticas o cosas de esas, se dijeron cosas de corazón, de amistad y fuerza las cuales eran las necesarias para conseguir el triunfo. Fueron palabras que dejaron mas de una lagrima entre los asistentes, pero llenaron de valor todos los corazones de los guerreros del balón que salieron a la cancha a dejarlo todo por ese sueno llamado Senegal.

Fue una final fuerte, nadie quería regalar nada, todas las bolas se corrían como las ultimas. Hasta que llegaron los goles de Jaramillo que le dieron la victoria al equipo corazón, el rival era un grupo de ingenieros que se rindieron ante la fuerza y corazón que pusieron los muchachos de Senegal para conseguir esa victoria.

Eso era Senegal corazón, fuerza y un grupo de guerreros , por eso este relato no es una tarea para una asignatura sino el homenaje a algo que tengo el gusto de decir que soy participe y que se que tanto a mi como a mis compañeros nos llena del mayor orgullo y alegría por eso digo ARRIBA SENEGAL!!!!!

Barras Bravas

POR :Diego Iván Cruz

El pasado jueves 15 de febrero varios integrantes de dos fracciones muy importantes de la barra brava de Millonarios generaron varios incidentes de violencia durante la práctica que realizaba el equipo en su sede del norte de la ciudad.

Blue Rain y Comandos Azules son los grupos de hinchas más numerosos y radicales que tiene en la actualidad en Club Deportivo Los Millonarios, estos bandos se encuentran en una profunda lucha entre si por obtener el control y el poder sobre una de las hinchadas mas importantes del país.

Estas agrupaciones que constantemente se ven enfrentadas con otras barras bravas de equipos rivales, esta vez no expresaron toda su violencia en contra de una de ellas sino la emprendieron entre ellos mismo como si fueran rivales a muerte y no defendieran el mismo sentimiento y pasión.

El incidente comenzó a las 9.30 de la mañana cuando los líderes de Blue Rain acudieron a la práctica del equipo en su sede del norte y comenzaron a entonar cantos ofensivos tanto para los jugadores como para los directivos y el técnico Juan Carlos Osorio, mientras esta situación transcurría algunos integrantes de los Comandos llamaban a sus “capos” para comentarles la situación y que ellos les dijeran como proceder con la misma. Cuando la practica termino y los integrantes de Blue Rain se retiraban de el lugar de entrenamiento fueron interceptados por alrededor de 20 miembros de los Comandos que los esperaban con palos y piedras para atacarlos. El combate entre estos dos grupos duro casi 25 minutos y fue cuando se vio venir a la policía cuando se disperso la pelea y todos los que participaron huyeron del sector.

Esta situación no es nueva entre hinchas de los mismos equipos, pues podemos ver como en Argentina esta situación se repite con frecuencia teniendo en cuenta que esta afición por los equipos se ha convertido en un negocio parecido a una mafia por lo que representa tanto económicamente como socialmente.

Nuestros equipos ya no tienen aficionados sino mercenarios de un espectáculo hermoso como es el fútbol, dejando a un lado todo lo que en verdad involucra la pasión por el deporte y también el ejemplo social y de unidad que represento esta actividad en los años mas importantes del siglo pasado. Ahora los hinchas quieren adquirir dominio sobre los lugares del estadio, obligar a los equipos a ponerlos en un pedestal de importancia mayor que el que tienen los mismos jugadores, podríamos decir en conclusión que quieren ser los protagonistas del fútbol por encima de todo lo demás.

El barrismo era pasión cuando el aliento de un grupo de aficionados hacia que un equipo sacara su coraje y buscara la victoria con todas sus fuerzas

RECUERDOS DE UNA GLORIA

Por: Hernán A Jaramillo R

Él próximo 25 de Febrero se cumplirán 2 años de la fundación de uno de los equipos más significativos en la Universidad de La Sabana. Un equipo compuesto por gladiadores que no pensaron en como lucir el uniforme ni mucho menos en la marca de sus guayos, simplemente se dedicaron a manejar la pelota de tal forma que después de años de sufrimientos y desatinos, lograron obtener el tan anhelado campeonato. Senegal era el equipo que despertaba toda clase de sentimientos en los alumnos de 6 y 7 semestre de la Facultad de Comunicación Social & Periodismo.

Fueron muchas las desilusiones que se vivieron dentro y fuera del terreno de juego. Los juegos de primera ronda siempre iniciaban con una oración para que aunque sea se pudiera comenzar el compromiso con el mínimo de jugadores. Se perdían puntos indispensables por errores infantiles, así mismo por dejarse llevar más de la emoción que de la razón, muchos jugadores fundamentales, se perdían de más de un partido por ver la tarjeta roja. Es aquí, en estos momentos donde surgió la jerarquía y experiencia de algunos de sus jugadores, decidieron “echarse el equipo al hombro”, y compartir esos pequeños detalles que hacen al buen jugador.

Desafortunadamente, en la mayoría de los casos las cosas suceden, y simplemente se dejan pasar sin preguntarse el porque. Senegal empezó a pensar en grande y las grandes proezas ya no estaban tan lejos. Los puntos empezaron a llegar y a su vez las alegrías en sus filas. Los comentarios ya sonaban en los pasillos de los camerinos y se preguntaba por varios jugadores que aparecían en las planillas como goleadores o porteros con la valla menos vencida; logros que se consiguieron después de creer verdaderamente en lo que había detrás de esa camiseta verdiblanca que los caracterizaba. Después de tristezas, alegrías y desilusiones, se logró lo impensado, el campeonato.

Estoy seguro que este próximo 25 de Febrero estaremos todos reunidos, ya no en una cancha de fútbol, sino tal vez en un salón de clase preparando los últimos trabajos y no la formación para el próximo partido. No pensaremos en como atacar al próximo rival, sino en como defendernos en nuestra próxima entrevista de trabajo. Son recuerdos que nunca se borraran de nuestras mentes, y que simplemente perduraran en el tiempo como su nombre lo dice, recuerdos.

PERFIL RAFAEL ROBAYO

HERNÁN A. JARAMILLO R
COD 200310175


Bogotano de nacimiento, amante del ajiaco santafereño e hincha furibundo del Club Deportivo Los Millonarios, se convierten en las tres características perfectas para definir, al mediocampista capitalino Rafael Robayo.

Desde muy pequeño fue un amante del fútbol, recuerda con orgullo que de las pocas fotos que hay en su casa de su infancia, en todas aparece con un balón o con camisetas alusivas a este deporte.

A la edad de 4 añitos, como el mismo lo dice, corría por los corredores de la casa pateando pelotas de tenis, de fútbol, y hasta de golf, empezando así, a demostrar sus primeros pinitos. Sus padres no ocultaron su sorpresa por ver a un niño tan pequeño ya pateando un balón.

Los parques aledaños a su casa se convertían en los escenarios perfectos para explotar todo su potencial, como el mismo lo afirma, dice que su presente se lo debe en gran parte a su abuela materna, ya que ella siempre, después de que llegara del jardín o del colegio, lo acompañaba a jugar con la pelota, es mas casi siempre terminaba jugando con ella.

Los años fueron pasando, pero no en vano. Al ver las reales condiciones de Rafael como jugador, sus padres decidieron llevarlo a la Escuela de Fútbol del Club Los Millonarios; es ahí donde comienza una carrera llena de alegrías, para este joven capitalino.

Las semanas en el colegio eran eternas para él, desde los mismos lunes, empezaba su desespero por que llegaran los fines de semana. Al llegar el fin de semana se amarraba sus guayos AS, y empezaba a patearle al tan conocido muro amarillo de la sede albiazul. Los refrigerios eran buenísimos decía el, después de los extenuantes trabajos, era muy bueno tomarse un yogurcito o un juguito Tampico con unas galletitas, eso recargaba las energías notablemente.

En el colegio no era el mejor, afirma con cierta timidez, los exámenes de matemáticas y de ciencias siempre los perdía, aunque siempre en las semanas de recuperación de materias, terminaba pasando todo, y la verdad, todavía no sabe como lo lograba.

El fruto de tanto trabajo comenzó a dar sus frutos, Rafael Robayo ya no era un simple alumno de una escuela de fútbol, ya se encontraba en las planillas de las diferentes divisiones, comenzando en la categoría infantil, hasta llegar a la juvenil y sub.-21.
Así mismo, el nivel adquirido por el jugador lo llevó a conformar las diferentes selecciones Bogotá.
Es aquí en este punto cuando Rafael, empezó a descifrar su futuro. En un campeonato nacional, en donde la selección capitalina pasó sin pena ni gloria, las directivas del Nacional de Medellín, decidieron llevarlo para sus divisiones inferiores en el año del 2002. Sin tener mucha suerte en tierras antioqueñas, aunque acepta que con las mujeres y con la comida si la tuvo, decidió probarse en el blanco blanco de Manizales, en donde debutaría como profesional en el año 2004.

En la ciudad de Manizales, vivió una de sus mayores alegrías, pero después de estar casi tres años lejos de su casa, de su comida y de su familia, prefirió arriesgarse, y volver a la capital y probar suerte en el Club de sus amores, el club Deportivo Los Millonarios.

Su alegría no ha podido ser mayor; en casa, con su familia, en su ciudad, y jugando en su equipo predilecto, Robayo simplemente vive lo que son sueños para muchos. Recuerda con alegría su primer y único gol como profesional, en el Atanasio Girardot, frente al Atlético Nacional, en un partido complicado.

Disciplinado y de carácter fuerte, es así como lo definen sus compañeros en el equipo embajador, y aunque sabe que en estos momentos no vive su mejor fútbol, es de los primeros en el trote, la parte más odiada por los futbolistas en cada entrenamiento.

Así es Rafael Robayo, el cachaco nacido un 24 de Abril de 1984, con sus 1.78 metros de estatura, casi sin suerte en el amor, pero eso no lo desvela; lo único que le quita el sueño es poder conquistar al profesor Osorio, pero no por su físico, sino con su fútbol.

Llegó la hora de la verdad

OPINION/ Comienza la libertadores

De los tres equipos colombianos clasificados a la Copa Toyota Libertadores, el único que faltaba por unirse a la fiesta, era el Deportes Tolima, quien tuvo que disputar un repechaje ante el modesto Táchira de Venezuela. Es este el punto en donde los llamados equipos chicos tienen que demostrar el porque de su intervención, en tan importante certamen.

El fútbol colombiano no atraviesa un buen momento; el fútbol demostrado por el equipo tolimense no fue el mejor, y deja muchas incógnitas para enfrentar la fase de grupos, y más cuando tiene al frente a equipos como el campeón del fútbol colombiano Cúcuta Deportivo, el brasileño Vasco Da Gama y el legendario equipo paraguayo Cerro Porteño.

En estos momentos, en que el futuro es bastante incierto, el voto de confianza va para el conjunto motilón, pues es quien demuestra una mejor interacción entre sus jugadores, y además un excelente trabajo realizado por su nuevo entrenador Jorge Luís Bernal, y del actual técnico de la selección Colombia, Jorge Luís Pinto, quien dejó un espíritu de trabajo en la base del elenco nortesantandereano.

El Deportivo Pasto, quien tendrá lugar en el grupo 8 al lado del Santos de Brasil, el Defensor Sporting de Uruguay y Gimnasia y Esgrima de la Plata de Argentina, tiene la tarea de demostrar lo hecho en el primer semestre del 2006; un equipo arrollador en su estadio La Libertad, a punta de ganas y sacrificio, aunque ojo, al frente no tiene a los mismos rivales de regular desempeño, tiene a los mejores de Suramérica.

La pregunta del millón surge cuando se pregunta por los que serían los responsables de las alegrías y de los triunfos. Es increíble ver que los equipos en vez de reforzarse para enfrentar el torneo, perdieron jugadores claves, en las estructuras de la institución. No hay más opción que rezar por los goles de panameño Blas Pérez, las atajadas de Agustín Julio, o las genialidades del experimentado Luís Omar Valencia.

Tres equipos colombianos, tres oportunidades, tres ilusiones; es la hora de dejar atrás esas fatales actuaciones de nuestros equipos, y sacar la verdadera casta, como la del 2004, por un equipo que llego como un desconocido y termino como el rey de América. Hoy la diferencia no es mucha, nadie conoce nuestras escuadras, somos una incógnita por resolver.